Muchos de nosotros hemos crecido con el discurso de fondo de una madre que se ha sacrificado mucho por nosotros. Mamás que dejaron de trabajar para cuidarnos, que se privaban de casi todo para que no nos faltara de nada, para que tuviéramos estudios y pudiéramos ser alguien en la vida, para que tuviéramos las oportunidades que ellas nunca tuvieron…
El sacrificio de las madres
Madres sacrificadas = Madres carceleras
Cómo NO ser una madre sacrificada
¿Por qué es tan difícil estar con los niños pequeños? Porque aún necesitamos que alguien nos mire a nosotras. Así de
inmaduras y de desamparadas llegamos a la maternidad. Lo peor es que ni siquiera nos damos cuenta. – Conversaciones con Laura Gutman(Fotos de las esculturas son de Gustav Vigeland en el Parque Vigeland de Oslo)